El “saber conocer” se refiere a la capacidad de los profesionales de enfermería para comprender y aplicar los conocimientos científicos y técnicos en su práctica clínica. Es un componente clave de la formación de enfermería, ya que permite a los profesionales prestar atención de calidad y basarse en evidencias a sus pacientes.

Para desarrollar este saber, los profesionales de enfermería deben tener un conocimiento sólido de la anatomía, fisiología, patología, farmacología y otras áreas relacionadas con la salud. Además, deben tener la capacidad de recopilar y analizar información relevante sobre el paciente, identificar problemas de salud y tomar decisiones basadas en evidencias.

La formación en enfermería también debe incluir la educación sobre la importancia de la investigación en la práctica clínica y cómo utilizar las evidencias para mejorar la atención de la salud. Los profesionales de enfermería deben estar al tanto de las últimas investigaciones y desarrollos en su campo y estar dispuestos a incorporar nuevas técnicas y prácticas cuando sea apropiado.

Además, el “saber conocer” incluye la capacidad de comprender y respetar las culturas, valores y creencias de los pacientes y sus familias. Los profesionales de enfermería deben tener una actitud de apertura y curiosidad hacia otras culturas y estar dispuestos a aprender de ellas.

En resumen, el “saber conocer” es esencial en la formación de enfermería y permite a los profesionales basarse en evidencias y prestar atención de calidad a sus pacientes. Al desarrollar este saber, los profesionales de enfermería pueden mejorar su práctica clínica y ayudar a mejorar la salud y el bienestar de sus pacientes.